5/1/10

no estoy triste, sólo es que no me apetece reír. me llamas de madrugada para decirme que ahora te van las rubias aunque lo nuestro siempre estuvo bien, que ya quedaremos algún día de estos para tomarnos un café o lo que sea y que me echas de menos. yo también a ti. no sé si por los conciertos a los que fuimos en el coche robado a tu madre, o porque extraño los besos a escondidas en el porche de mi casa cuando mi abuelo no miraba, o a lo mejor por las excursiones al jardín de atrás.
no estoy triste... sólo es que no me apetece reír.